Clases de escritura
Encuentros individuales, grupales e institucionales para perfeccionar la escritura
Encuentros individuales, grupales e institucionales para perfeccionar la escritura

Además de corregir textos en silencio y encerrada sola durante horas, hace muchísimos años doy clases de escritura. Me apasiona el intercambio de esos espacios: solo sé cuánto sé y lo que puedo aportarte cuando comienzo a contarlo, cuando desde un lugar respetuoso, humilde y sincero te aconsejo para que escribas mejor. Y, a la vez, descubro todo lo que ignoro cuando vos me contás sobre el tema que te interesa escribir.
Las clases de escritura grupales se dividen en dos momentos.
En el primero, aprendemos normas, reglas, estructuras y vemos ejemplos prácticos para bajar toda esa teoría a textos concretos.
En el segundo, jugamos. Sí, somos adultos y jugamos. Nos reímos, escribimos a partir de consignas disparadoras que pretenden darle vida a la mano, apagar los prejuicios, la rutina, los miedos y todos los tipos de “no puedo”.
La cantidad de participantes es reducida: no más de ocho.
Duran dos horas y la modalidad es virtual, a través de Zoom.
Después de cada clase, envío el material trabajado y algunos disparadores para la clase siguiente.
¿Cuál es mi objetivo? Que aprendas a escribir mejor y que, mientras tanto, te diviertas.

Un publicista reconocido dijo que el término “corrector/a” tenía varios problemas.
Uno de ellos era su carga semántica respecto de los finales: es la persona que llega cuando el texto está terminado y, recién ahí, se dedica a “corregir”.
Pero si algo me enseñó la experiencia fue que el texto es un proceso, una trama que se teje en el tiempo. Y resulta mucho más fácil andarlo cuando alguien que sabe nos ayuda, nos saca dudas, nos muestra mejores maneras.
¿Cómo trabajamos en las clases de escritura individuales?
Nos conectamos a la hora acordada y vos traés tu texto. Recién empezado, con dos renglones o diez párrafos, no importa. Compartimos pantalla, lo leemos en voz alta y, mientras te aporto sugerencias o corrijo errores, te explico los motivos.
La experiencia de aprender en vivo, con nuestra propia escritura, es una de las más enriquecedoras.
¿Qué pasa si todavía no pudiste escribir nada?
Nos encontramos igual y te propongo ideas disparadoras, repasamos reglas gramaticales y te aconsejo de qué manera organizar el trabajo.

Las clases de escritura para instituciones son encuentros intensivos en los que tus colaboradores aprenden normativa y técnicas para escribir mejor.
Cada vez más, las empresas que no comunican, no tienen presencia en las redes o no le hablan de la manera correcta a su público están destinadas a desaparecer.
Las clases están divididas en dos partes: durante una hora y media, aproximadamente, aprendemos teoría y analizamos casos prácticos.
En la hora y media restante los participantes escriben de manera individual o grupal a partir de consignas disparadoras y trabajamos sobre esos ejemplos.
El objetivo es que aprendan de sus propios errores y puedan redactar textos de manera clara y efectiva.